El cuidado de una persona enferma, anciana o discapacitada, es una dura carga para cualquier persona que se vea sometida a dicha tarea y es frecuente que en algún momento quien cuida se sienta incapaz de afrontarlo, ya que compromete su bienestar, e incluso su salud.
Este síndrome de cuidador enfermo, se conoce así, pues es una condición plurisintomatica (es decir, tiene varios componentes en ella) en el cual se afecta todas las esferas de la persona, lo que tener repercusiones médicas, sociales, económicas y otras, que pueden llevar a la persona a una frustración que lo haga claudicar en sus atenciones de cuidado.
Quienes son las personas que cuidan y que sucede en ellas?
En nuestro país, la gran mayoría de cuidadores son mujeres de edad media que tienen una relación familiar con la persona necesitada, con características similares como:
- Contraen un gran carga física y psíquica
- Se responsabiliza de la vida del enfermo: medicación, higiene, cuidados, alimentación, etc.
- Va perdiendo paulatinamente su independencia, porque el enfermo cada vez le absorbe más.
- Se desatiende a sí misma: no toma el tiempo libre necesario para su ocio, abandona sus aficiones, no sale con sus amistades, etc. y acaba paralizando, durante largos años, su proyecto vital.
- Espera ser ayudada por las personas a su alrededor.
La tarea de cuidador a otras personas, puede ser retadora ya que hay condiciones que hacen que esta sea complicada, como por ejemplo,
- La persona cuidadora, no tenga a otras personas que le ayudan o apoyen.
- Cuando el enfermo le cueste seguir órdenes sencillas o no pueda comunicarse.
- Cuando el enfermo tenga problemas de comportamiento, como gritar, golpear, salirse de la casa y perderse. Esto ocurre especialmente en pacientes con demencia.
Al cuidar a otras personas es normal tener muchos sentimientos encontrados, pueden sentirse asustados, tristes, solos, que no los aprecian, frustrado, enojado, culpa o que la vida no es justa. Lo que no es normal es que estos sentimientos duren mucho tiempo o alteren nuestra vida cotidiana. Por estas razones los médicos pensamos que el cuidador es un paciente oculto, el cual hay que observarlo de cerca para diagnosticar una enfermedad de forma precoz.
Que síntomas pueden presentan?
El estrés al que está sometida la persona que cuida a otra puede alterar de modo significativo su salud, estado de animo y comportamiento.
Síntomas de sobrecarga de estrés
- Ansiedad
- Enojo excesivo hacia la persona que cuida, su familia, o a sí mismo
- Cansancio extremo
- Irritabilidad
- Problemas para dormir
- Abstinencia social
En algunas ocaciones también puede presentar síntomas de depresión, como:
- Sentirse triste, sin esperanza
- Perdida de interés en las cosas que usualmente hace
- Dolores de cabeza, espalda o problemas digestivos
- Perdida de interés en el sexo
- Ideas de quitarse la vida o hacerse daño
- Problemas para recordar cosas, concentrarse, o tomar desiciones.
- Cambios en el apetito, pérdida de peso no intencional o ganancia
- Llanto fácil
Que puede hacer si presenta estos síntomas?
- Hable con su médico de familia, si no lo tiene busque uno, no tenga miedo o pena de hablar de estos sentimientos. El o ella puede recomendarle métodos para ayudarle.
- Hable con su familiar y su familia. Hablar con su familia de cómo se siente le pude producir pena o angustia , pero al hablarlo con ellos puede bajar el nivel de estrés al que está sometido.
- Cuide de su salud. Coma sanamente, realice actividad física, no tome alcohol, ni fume, acuda de manera preventiva a su médico de familia.
- Edúquese sobre la enfermedad o condición de la persona que cuida. Busque toda la información posible sobre la enfermedad, tratamientos, posibles efectos adversos. Estar informada le puede dar sentido de control y seguridad.
- Organicé su vida. cuidar a una persona enferma puede ser una tarea de tiempo completo, pero probablemente tenga otras responsabilidades, como hijos que cuidar o trabajar. Organicé de tal manera que le permita maximizar tu tiempo, busque apoyo si es necesario.
- Busque un grupo de ayuda. Compartir con personas que pasan por lo mismo, ayuda a ver una perspectiva diferente sobre la condición de cuidador y puede contribuir a encontrar soluciones para resolver problemas, que a su vez le ayudan a disminuye el estrés.
- Busque consejería. Reconocer que necesita ayuda es importante, hable con su médico de familia.